domingo, 26 de julio de 2015

COLES DE BRUCELAS O REPOLLITAS

Las coles de Bruselas  o repollitas  de Bruselas hacen parte de la familia de las crucíferas (brócoli, coliflor, berro, mostaza). Es un alimento recomendado en toda dieta de adelgazamiento por el bajo aporte calórico, pero además nos brinda infinidad de beneficios medicinales. Estas actúan en tres frentes importantes del organismo: como desintoxicante, antioxidante y como anti-inflamatorio. Es así como sus compuestos, nutrientes y vitaminas llegan a favorecer nuestro organismo.
Las coles de Bruselas son benéficas para el aparato digestivo, no solo por la gran cantidad de fibra que ayuda a acelerar el metabolismo, sino que también contiene glutamina que ayuda a eliminar la acidez y a prevenir las úlceras o cualquier trastorno estomacal. Además aportan gran cantidad de vitaminas y minerales y es un potente diurético.
Se recomienda cocinarlas en poca agua o al vapor  para que conserven sus propiedades.

REPOLLITAS DE BRUSELAS GRATINADAS
1 kilo de coles de Bruselas
200 g de crema de leche
1 cucharada de ajo fileteado
2 cucharadas de aceite de oliva
Pimienta al gusto
200 g de queso  rallado
Limpiar y cocinar las repollitas en poca agua con sal, por 5 – 10  minutos (deben quedar  al dente), escurrir y apartar. Mientras, rehogar en el aceite de oliva el ajo fileteado, agregue la crema de leche, sal y pimienta al gusto. Cortar las repollitas a la mitad y acomodar en un refractario engrasado. Bañar con la crema de leche y regar por encima el queso rallado. Llevar al horno a gratinar.


REPOLLITAS DE BRUSELAS EN JUGO DE LIMÓN CON WHISKY
1 libra de repollitos de Bruselas
Jugo de 3 limones
Sal marina al gusto
1 cucharadita de azúcar
1 cucharada de whisky
Limpie y enjuague las repollitas. Exprima el jugo de los limones y colóquelo en una cacerola. Adicione la sal y el azúcar y ponga a hervir. Meta las repollitas en la olla y déjelas cocer a fuego lento por dos minutos. Destape y aumente el calor. Sacuda la olla y verifique que los repollitos no se peguen, continúe hirviendo hasta el líquido se haya reducido en un 90%. Vierta el whisky y sirva.

COLES DE BRUSELAS A LA MOSTAZA
500 g de coles de Bruselas
100 ml de aceite de oliva
50 ml de vinagre
1 cucharada de mostaza Dijon
1 cucharadita de salsa de soya
1 pizca de albahaca seca
1 pizca de tomillo seco
Sal y pimienta al gusto
Hervir las coles en poca agua, sin tapar, por 10 minutos, escurrir. Aparte, en bol batir el aceite, vinagre, mostaza, salsa de soya, albahaca, tomillo, sal y pimienta. Agregar las coles, remover bien y tapar el recipiente. Llevar a la nevera toda la noche. Pasar las coles a un plato para ensaladas y servir.

viernes, 10 de julio de 2015

APIO

El apio (apium graveolensse ha utilizado desde tiempos históricos, tanto en la cocina como por los herbolarios. Pertenece a la misma familia que el hinojo y el perejil. Tiene un porcentaje elevado de agua, lo que lo hace un alimento bajo en calorías. Para aprovechar al máximo sus propiedades se recomienda comerlo crudo.
Entre los componentes del apio cabe destacar minerales como hierro, potasio, calcio, yodo y magnesio; proteínas, carbohidratos, fibra y vitaminas A, C, B, D, y K. Entre los beneficios para la salud tenemos:

·         Efecto diurético
·         Facilita la digestión
·         Ayuda a bajar el colesterol y la hipertensión
·         Ayuda a evitar la metástasis de células cancerosas
·         Antiinflamatorio
·         Cura el insomnio
·         Elimina y previene cálculos
Algunas recetas con apio:

ENSALDA DE APIO, BROCOLI Y MAIZ BICHE
1 brocoli mediano
300 g de granos de maíz fresco o de lata
2 pencas de apio
Jugo de un limón
Aceite de oliva
Sal y pimienta
Si el maíz es fresco, separamos los granos, separamos también el brócoli en flores y cortamos el apio en rebanadas. En una olla a vapor o sartén honda ponemos a hervir el maíz por aproximadamente 5 minutos, luego agregamos el brócoli y el apio y cocinamos 2 minutos más. Retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Una vez que los vegetales están fríos los colocamos en una ensaladera, agregamos el aderezo que preparamos con el limón, aceite, sal y pimienta. Revolvemos bien y dejamos reposar unos minutos antes de servir.

BATIDO DE APIO, PEPINO Y PIÑA
2 tallos de apio
1 pepino mediano
1 rodaja de piña
1 cucharada de miel (opcional)
Lavar y picar el apio y el pepino. Pelar y picar la piña. Colocar juntos en la licuadora y procesar hasta que se forme un líquido uniforme y sin grumos. Si resulta muy espeso puede agregar un poco de agua. Se debe tomar en ayunas y desayunar una hora después.
 
ENSALADA DE APIO Y MANZANA VERDE
2 tallos de apio (sin hojas ni venas)
1 manzana verde
4 cucharadas de yogurt  griego
1 cucharadita de salsa de soya
Sal y pimienta a gusto

Lavar y quitar las hojas y las venas al apio. Lavar y quitar las semillas a la manzana. Picar ambos en cuadritos del mismo tamaño. En una ensaladera mezclar el yogurt con la salsa de soya, sal y pimienta. Mezclar bien y agregar los vegetales. Revolver y dejar reposar unos minutos antes de servir.

jueves, 2 de julio de 2015

JENGIBRE (KION)

El jengibre o kion (zingiber officinale) es una planta de la familia de las zingiberáceas, cuyo tallo subterráneo es un rizoma horizontal muy apreciado por su aroma y sabor picante. Crece en todas las regiones tropicales del mundo. Las variedades más caras y de mayor calidad generalmente proceden de Australia, India y Jamaica, mientras que las más comercializadas se cultivan en China y Perú.
Famosos médicos de la antigüedad como Galeno y Avicena, usaban el jengibre como medicamento para varias dolencias. Investigaciones recientes han comprobado que la raíz del jengibre es efectiva en el tratamiento de las náuseas. Así mismo el útil como estimulante gastrointestinal, tónico y expectorante. Además es un antiinflamatorio natural.
Los rizomas tiernos son jugosos y carnosos, con un fuerte sabor.  Se recomienda consumirlo con moderación y acompañando otros alimentos. Se utilizan en infusiones, licuados, jugos, ensaladas, guisados o postres. El abuso en su consumo puede debilitar la visión. Las mujeres embarazadas, las personas en tratamiento para la diabetes o hipertensión deben consultar con su médico antes de consumirlo.
Algunas recetas con jengibre:

JENGIBRE CONFITADO
Esta es una buena manera de preservarlo cuando tenemos una buena cantidad y no queremos que se seque y se deteriore. Una vez confitado, el jengibre se puede consumir como si fuera una golosina, o puede ser utilizado para desarrollar otras recetas como pan, bizcochos, turrones.
200 g de jengibre pelado
800 g de azúcar
400 g de agua
Se pela el jengibre y se corta en la forma que se quiera (bastones, rodajas, dados). Se pesa para establecer la cantidad de azúcar que se necesita y se coloca en una olla con agua que lo cubra. Se lleva a ebullición y se deja cocinar a fuego lento, hasta que esté tierno. El tiempo depende del tamaño de las porciones.
Una vez cocido el jengibre se escurre. Se prepara el almíbar con el azúcar y el agua. Cuando empiece a hervir y el azúcar esté disuelto, agregar el jengibre y se deja cocinar a fuego lento con la olla semi tapada, desplazando un poco la tapa. Cuando el agua esté casi toda evaporada, extender el jengibre sobre placa de silicona o papel parafinado y dejar secar a temperatura ambiente. Conservarlo en recipiente hermético, preferiblemente de vidrio.
  
PURÉ DE COLIFLOR AL JENGIBRE
800 g de coliflor
250 ml de leche
200 ml de agua
2 dientes de ajo
1 trozo de jengibre
½ cucharadita de comino molido
½ cucharadita de pimienta de Jamaica
Aceite de oliva
Sal al gusto
Limpiar,  trocear la coliflor y ponerla a hervir, en una olla, con el agua, la leche y la sal. Cuando esté tierna retirarla del fuego y reservar.
En una sartén con el aceite de oliva, colocar los ajos y el jengibre rallados. Rehogar unos minutos a fuego lento. Agregar  comino, pimienta de Jamaica y mezclar bien. Verter sobre la coliflor. Añadir un chorrito de aceite de oliva y triturar hasta obtener un puré fino y homogéneo. Se puede variar la textura y densidad del puré poniendo más o menos agua/leche.
Servir el puré de coliflor y adornar con tomates asados, perejil o cebollin y un chorrito de aceite de oliva.
  
BIZCOCHO DE TÉ NEGRO Y JENGIBRE
240 ml de agua
1 bolsita de té negro
200 g de harina
150 g de azúcar
55 g de margarina
1 huevo
2 cucharadas de melaza o miel
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de jengibre en polvo o rallado
Precalentar el horno a 180°C. Preparar la infusión de té y dejar enfriar. Tamizar la harina con el polvo de hornear, el bicarbonato. En un bol batir la margarina con el azúcar, agregar el té, la melaza, el huevo, el jengibre y seguir batiendo. Añadir los secos y mezclar con espátula hasta que no haya grumos. Verter en molde engrasado y enharinado y hornear de 35 a 40 minutos o hasta que al introducir un palillo salga limpio.