La espinaca criolla o espinaca de Ceilán
(Basella alba), también llamada espinaca de malabar o espinaca china es una
especie perteneciente a la familia Basellaceae. Es una parra perenne, que se da
muy bien en climas cálidos y húmedos. De crecimiento rápido, alcanza hasta 10 m
de largo. Sus hojas gruesas, semi-suculentas, en forma de corazón tienen un
sabor suave y una textura mucilaginosa. Como otras verduras es rica en vitamina
A y C, hierro y calcio. Tiene bajo contenido de calorías, y relativamente alto
de proteínas por calorías. Es una fuente particularmente rica en fibra
dietética. También es rica en clorofila que contribuye a la elaboración de la
sangre. Buena fuente de vitamina B y ácido fólico.
Las propiedades culinarias de la
espinaca criolla incluyen su uso para espesar sopas, para guisos y batidos.
Produce gran cantidad de frutos morados que también son aprovechados en jugos.
1 Taza de frutos maduros
1 taza de agua
Azúcar al gusto
Lavar bien los frutos y llevarlos a la
licuadora con una taza de agua y azúcar al gusto. Procesar por dos minutos
aproximadamente, colar y servir.
1 puñado de hojas de espinaca
1 cebolla cabezona mediana
1 tomate maduro
1 diente ajo
2 -3 ajíes dulces
Sal y pimienta
Aceite c/n
Lavar bien las hojas de espinaca. En una
sartén hacer un hogao con el aceite, la cebolla, el tomate, el ajo y el ají
picaditos. Agregar las espinacas cortadas en tiras y cocinar hasta que ablande.
Agregar sal y pimienta al gusto. Servir como acompañamiento de las comidas principales.
1 puñado de hojas de espinaca
2 naranja
1 zanahoria grande
1 rebanadita de jengibre
Lavar y picar las hojas de espinaca,
exprimir las naranjas, pelar y rallar la zanahoria, pelar y picar el jengibre.
Colocar todo en la licuadora y procesar por 3 minutos aproximadamente. Tomar
sin colar.